Salimos de Zaragoza a las 7 de la mañana mi hijo Alberto y yo, con la idea de ir a escalar la vía Anorexia en los mallos de Riglos, una ruta rápida y bien equipada.
Al llegar al pueblo tomamos un café en el refugio, para a continuación subir por una carretera que hay en la entrada del pueblo, y que te deja junto al centro de interpretación de aves ARCAZ, aparcamos en un amplio parking.
Comenzamos la aproximación, bajando un poco y tomando una pista evidente que va
hacia los mallos pequeños, giramos en el primer cruce a la izquierda y subimos
por un ancho sendero, hasta tomar otro más estrecho que nos lleva a la base de la pared,
en total desde el aparcamiento unos 20 minutos.
L1 (40 m, 9
seguros, 5c). Subimos por
una placa hasta llegar a la primera panza (3º seguro), posibilidad de subir por
una fisura a la derecha de la chapa, la siguiente panza se puede evitar dando
un pequeño rodeo por su izquierda, hasta llegar a un techo desplomado bien
asegurado con dos parabolt. Buena presa para la mano izquierda, en el cual hay que subir los pies y
chapar, seguimos por la derecha más
fácil hasta llegar a la reunión (dos parabolt con argollas amarillas).
L2 (45 m, 8
seguros, 5a). Salimos por
la derecha de la reunión por un muro bastante vertical, bonito largo con muy
buena roca, mantenido en dificultad, pero con buenas presas para pies y manos. Superamos
un pequeño espolón para llegar a la reunión (dos parabolt).
L3 (30 m, 1
seguro, 3b). Salimos
rectos de la reunión por gradas fáciles (1 seguro), para llegar casi andando
hasta la reunión, (un parabolt de argolla amarilla), hacemos reunión en el parabolt, que está más a la
izquierda de las tres reuniones que hay.
L4 (35 m, 4
seguros, 5b). Salimos con
tendencia a la izquierda, para superar un muro vertical de unos 15 metros con
algún paso fino, luego la placa se tumba mucho, y llegamos a la reunión equipada con un
gran argolla amarilla.
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